Dicen que en la simplicidad es donde reside la belleza de
las cosas, que cada día que pasamos es un día más perdido sin apreciar esas
pequeñas cosas que nos rodean y pasan desapercibidas una mirada, una sonrisa,
un beso… ¿por qué de qué sirven las palabras sin hechos? Lo que quiero decir es
que esas pequeñas cosas que nadie se detiene a observar son eternas, esa
eternidad que congela el momento y te transporta durante unos segundos a un
lugar donde todo es posible donde todo dura para siempre y lo crees, por unos
segundos el mundo nos permite tener esa eternidad, esa eternidad que tendremos solo
nosotros para siempre, que nunca se volverá a repetir, y sin embargo muchas
veces no nos damos cuenta de que ese momento, esa eternidad nunca volverá y será
un simple momento convertido en lágrimas.
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